¡Lejos de Europa, lejos del éxito!

Ha comenzado una nueva temporada en el fútbol de Europa y, con esto, una nueva temporada para los pocos mexicanos que se mantienen del otro lado del charco.

Hace unos días me percaté de que en mi aplicación de resultados deportivos todavía me llegaban notificaciones de los equipos en los que ya no juegan nuestros paisanos, y fue hasta hace unas horas que me tomé el tiempo de eliminarlos de mis notificaciones.

Y no solo hablo de los que recién han regresado o salido de sus equipos, sino de los que ya llevan un rato. (sí, mi desidia ha soportado por tantos meses notificaciones de clubes que honestamente no me interesan, como el Genk para el que jugaba Gerardo Arteaga)

Pero esta situación me hizo darme cuenta de lo verdaderamente crítica que es la situación del fútbol mexicano. Y en este caso, hablando estrictamente de la selección mexicana.

Para no empezar con tanto negativismo esta columna, hablemos de lo ‘positivo’, y eso es que de los pocos futbolistas en el viejo continente, 3 estarán en la mejor liga del mundo, y eso sí es una novedad.

Edson Álvarez como gran estandarte, junto a Raúl Jiménez que está arrancando su séptima temporada en la Premier League,  y el recién llegado Julián Araujo, que extrañamente no ha sido tan considerado por selección mexicana pero se mantiene con regularidad en el fútbol europeo.

Dentro de estas noticias positivas, definitivamente tengo que incluir a Johan Vázquez, quien se ha afianzado en una de las ligas más complicadas como la Serie A y parece estar listo para un salto a un mejor club.

Desafortunadamente, quitando estos 4 casos, el resto del panorama no es alentador, pues en España sólo quedó Alex Padilla en la primera división, lo cuál es una gran noticia pues tiene apenas 20 años, pero para efectos inmediatos no será una solución, ya que es cuestión de tiempo para que regrese al filial donde realmente se desempeña. Recordemos que es el tercer arquero del Bilbao y tras las lesiones de Unai Bilbao y Julen Agirrezabala recibió esta maravillosa oportunidad, pero difícilmente encuentre cabida en el primer equipo a corto plazo.

César Montes, por ahora, se mantuvo en España pero en la segunda división. Lo cual evidentemente significa un retroceso pero al mismo tiempo una decisión de mucho valor, pues ha tenido ofertas importantes en nuestro país y ha priorizado el mantenerse en Europa.

En Países Bajos se mantiene Santi Giménez y ‘Chucky’ Lozano, aunque este último sólo por lo que queda del semestre, por lo que habría que quitarle también el botón de notificación al PSV en los próximos meses.

En Grecia, el AEK nos hizo un enorme favor al no aceptar la millonaria propuesta de Rayados por Orbelín Pineda, y aunque realmente el fútbol griego no es garantía de buen nivel (peor aún si no competirán en torneos europeos), siempre consideraré mejor que el futbolista esté en un entorno distinto al de nuestro fútbol. Donde el conformismo y poca competencia han mermado considerablemente el nivel individual de nuestros jugadores.

Para nuestra mala suerte, aquí prácticamente se acabó el análisis sobre los futbolistas mexicanos en el viejo continente, pues resta hablar de Luis Chávez, al cual valoramos enormemente su mentalidad y ganas de salir de la zona de confort (nuevamente no yendo a Rayados) para jugársela en Rusia. Desafortunadamente no ha salido la apuesta del todo bien, pues su nivel no ha sido el esperado y no se ve la luz al final del túnel para que el fútbol ruso regrese a competiciones europeas.

Por último, Rodrigo Huescas debe mantenerse como una esperanza, pero al mismo tiempo, una incógnita. Condiciones tiene, y también mostró valor al salir de Cruz Azul, pero la liga de Dinamarca no representa realmente un salto de calidad, aunque sí lo es el salir de la zona de confort y eso siempre va a sumar.

Con esto, ni Javier Aguirre ni Pep Guardiola podrán hacer mucho. Y es que la materia prima está en uno de sus peores momentos históricos. Para ser más claro, ningún jugador mexicano disputará Champions League, mientras que para el Mundial del 2022, donde Argentina logró el título,  su selección contaba con 18 futbolistas en dicha participación.

No es ciencia nuclear o mecánica cuántica,  es una fórmula bastante sencilla de entender; jugadores compitiendo en mejores ligas = jugadores más competitivos = mejores resultados a nivel selección.

A dos años del mundial en casa, lejos de la ola en la tribuna y el “sí se puede”, parecemos estar condenados a una participación muy pobre…. Otra vez.

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